Sidney: Imperdibles

Todos hemos fantaseado alguna vez con hacer un viaje a algún lugar lejano y desconocido. Hoy os proponemos un viaje que cumple todos esos ingredientes: un viaje a las antípodas, Australia. A los que vivimos en Europa, casi 17.000 km nos separan de Australia. Ese país desconocido para la mayoría, del que apenas oímos hablar salvo cuando en los telediarios de Nochevieja anuncian el Año Nuevo. Sidney es su ciudad más popular y su Ópera House, sin duda, uno de los lugares más fotografiados del mundo. Pero esta ciudad, cárcel de ultramar en sus orígenes en el siglo XVIII, tiene muchísimo más! Aquí os dejamos una lista de experiencias para los que tengáis la suerte de visitarla.

Alucinar con el Opera House

Inaugurado en 1957 con presencia de la reina Isabel II, es sin duda uno de los edificios más famosos del siglo XX. Desde el primer día os sentiréis atraídos por sus bóvedas de más de un millón de azulejos y querréis fotografiarla desde cada ángulo de la ciudad.

Pasear por el Harbour Bridge

Este puente, construido en 1932 como símbolo de la prosperidad económica de Australia conecta el centro financiero a la altura de Milsons Point con la costa norte de Sidney. Destaca por su gran arco de acero, convirtiéndolo en uno de los mayores del mundo. Tanto si recorréis a pie sus más de 1.100 metros de longitud, como si decidís reservar el Bridgeclimb para subir hasta lo alto de su arco, las vistas sobre la bahía y el Opera House son espectaculares.

Disfrutar como un niño en Luna Park

Luna Park es un parque de atracciones de los años 30 maravillosamente conservado y que todavía está en funcionamiento (debéis chequear horarios y días de apertura antes de ir). Cuenta con una montaña rusa, una moon ranger que te suspende 20 metros de altura, un castillo mágico, toboganes y mucho mucho algodón de azúcar.

Convertirse en surfers por un día en Bondi Beach

Bondi Beach es sin duda una de las playas referentes para el mundo del surf en Australia, aunque son muchos los que simplemente acuden para dar un paseo, practicar algo de deporte o disfrutar del ambiente en alguna de sus terrazas. Sin embargo, su oleaje, sus fuertes corrientes y en ocasiones plagas de medusas la convierten en una playa peligrosa, con una media de 30 intervenciones diarias por parte de salvamento marítimo, cuya sede central se encuentra allí mismo.

Contemplar la belleza de St. Mary’s Cathedral

Esta preciosa catedral de estilo neogótica, resalta sobre todos los edificios del centro financiero de Sidney. Visitada por el Papa Benedicto XVI es además la más grande construida en Australia.

Recorrer el sendero desde Coogee Beach hasta Bondi Beach

Un paseo costero de 7 km por un sin fin de playas, parques, acantilados, bahías y piscinas de roca y acantilados. Si sois de los aficionados al running, ésta será una buena prueba física, al igual que una experiencia fantástica. A lo largo de la ruta atravesaréis también un cementerio situado frente al mar, seguramente de los más espectaculares que hayáis visto nunca.

Alucinar con el atardecer desde el ferry a Manly

No solo por el destino, sino por el recorrido en sí, hace de este ferry una actividad obligatoria. Y es por eso por lo que coger sitio en primera fila se convierte en una verdadera odisea, especialmente los domingos, cuando este ferry es gratuito. La playa de Manly, aunque menos frecuentada que Bondi, es también una opción ideal para el surf o para cualquiera de las excursiones que se organizan en sus alrededores.

Recrearse con las vistas desde Millers Point Observatory Park

Millers Point es un minúsculo parque en medio de Sidney rodeado de callejones empedrados situado al sur del barrio de The Rock, primer asentamiento de la ciudad. Se pueden disfrutar de una de las mejores vistas a la bahía de Sidney.

Visitar Darling harbour

Este puerto de la ciudad de Sidney es una amplia zona recreativa fruto de un proyecto de renovación urbana que terminará en 2020. Pararse en alguna de sus innumerables terrazas y disfrutar de la tarde durante la happy hour en esta zona tan popular es algo más que recomendable.

Perderse en el bullicio de Chinatown

Este barrio es el epicentro de la comunidad asiática, en concreto la china, que es la mayor comunidad extranjera de la ciudad en Sidney. Chinatown es además un paraíso gastronómico para los amantes de la comida oriental porque encontraréis todas las variedades de cocina asiática en unas pocas calles: desde barbacoas coreanas, restaurantes de japoneses, de cocina china o tailandesa… hasta cadenas de sopas de las que solo hay en China!

Pasear por el Royal Botanic Garden

El Jardín Botánico de Sidney es un lugar ideal para disfrutar de la naturaleza y desconectar de la ciudad. Este parque de unas 30 hectáreas, se encuentra estratégicamente entre el Opera House, la bahía de Sidney y el distrito financiero, haciéndolo un lugar muy frecuentado tanto por turistas como locales.

Enamorarse de la bella y azulada neblina de las Blue Montains

El parque natural de las Blue Montains a dos horas de Sidney, es patrimonio de la humanidad por sus más de un millón de hectáreas llenas de acantilados, cascadas y sobre todo de bosques de eucalipto. Éstos son los encargados de dar nombre al parque ya que la resina que generan sus hojas, produce una fina niebla en condiciones de mucho calor, que a su vez refracta la luz dando un color azulado desde la distancia. La vistas más impresionantes son Leura Cascades, Wentworth Falls y por supuesto The Three Sisters*.

*Cuenta la historia que tres hermosas hermanas se enamoraron de tres hermanos de otra tribu. Como la ley prohibía que hombres y mujeres de diferentes tribus contrajeran matrimonio, un poderoso anciano decidió protegerlas con un hechizo que las convertiría en piedra hasta que ellas estuvieran a salvo. Desafortunadamente aquel anciano, que era el único capaz de revertir el hechizo, murió en una de las batallas y las tres hermanas tuvieron que resignar su belleza como humanas para seguir deslumbrando a la gente como piedras.

Disfrutar del afterwork como cualquier trabajador de la ciudad

La actividad social después del trabajo es muy común en Australia (al igual que en UK) y nunca dejan escapar disfrutar de una pinta con sus amigos de trabajo. Cerca del puerto o en la zona financiera, hay innumerables locales con happy hour y es muy normal ver grupos de gente entrajetados disfrutando de unas cervezas. No solo por el buen ambiente que se respira, sino porque la cerveza fuera de este horario es bastante cara, recomendamos aprovechar estos afterworks.

Sidney enamora, puede que sea porque debido a la distancia a la que se encuentra de Europa cada minuto allí debe disfrutarse como si no fuésemos a volver o porque en el fondo es un continente tan diferente a la vieja Europa. Lo que si os recomendamos es visitar el norte de la isla y por supuesto alucinar la barrera de coral, os dejamos nuestro viaje por la región de Queensland aquí.

Para cinéfilos… dónde se rodó?

• Matrix Reloaded y Matrix Revolutions: Sidney fue escenario en la saga futurista de Matrix, en su idea de no mostrar iconos de la ciudad no veréis ni la Opera ni el Harbour bridge, pero si distinguiréis el rascacielos del centro comercial The Metcentre, en la esquina entre las calles George y Margaret Street, se transformó en las oficinas de la empresa en la que trabajaba Keanu Reeves. Otras localizaciones fueron el Colonial State Bank Centre, hotel The Westin Sidney o fuente de Martin Place.